SOBRINO, JAVIER / LEON, ESPERANZA
Mi higuera solía ser el lugar más maravilloso del mundo. Entre sus ramas era el capitán, rodaba en bicicleta. Jugaba a todo tipo de cosas en ella. En mi higuera besaba a Ángela sin ponerme colorado. Era feliz. Pero un día me caí de la higuera y me ortigué las piernas. Mi madre me curó el escozor, me abrazó y entonces, en su regazo, sí descubrí el lugar más maravilloso del mundo