Mientras trota y sufre los rigores del clima leonés y de su edad, así como la rebelión de su cuerpo maltratado por carbohidratos y alcoholes, deja que su mente deambule por todos aquellos aspectos de la vida cotidiana que despiertan su inagotable curiosidad: la vida, la literatura, el arte, las drogas (legales e ilegales), el sexo, la redención, la muerte o las deficiencias del alumbrado público. Y aún tiene la fuerza de voluntad necesaria para poner por escrito a modo de diario las incidencias y resultados más pedestres de estas carreras vespertinas. En muchas de estas entradas aparecen personajes de la política local y nacional, el fútbol y las glorias del atletismo y sus gestas, filósofos, humoristas, literatos,... todo un bestiario que pone de manifiesto el absurdo que rodea nuestra existencia.
