Todo trabajo honrado posee la misma dignidad. Lejos quedan los servilismos, las castas, o la consideración -tan propia de otras épocas- de los oficios manuales como inferiores a los intelectuales.
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios mediante el análisis de sus hábitos de navegación. Puede obtener más información aquí o cambiar la configuración.