Vivimos en una época de desorientación moral. Estamos perdidos en un mar de brumas, sin brújula, sin referencias, sin faro que guíe. Vivimos en la época de la ética borrosa.
Esta web utiliza cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios mediante el análisis de sus hábitos de navegación. Puede obtener más información aquí o cambiar la configuración.