"El Caminante" es un nuevo paso importante en
la larga, meditada y sugerente obra literaria de Carlos de la Sierra.
A través de los ojos inquietos, sensibles y receptivos del
protagonista podremos viajar desde los campos de Castilla por la
Europa convulsa del siglo XVIII, siglo de las luces y del terror.
Y así, de su mano, descubriremos diversas situaciones en
las que el hombre muestra sus deseos y ensoñaciones: la
muerte, el engaño, las luchas, el poder, la fiesta... La
conclusión que implícitamente nos propone Carlos
de la Sierra paseante, observador, sensible, documentado no
es muy alentadora: el ser humano dista mucho de haber conseguido
su realización como persona, pensamiento que recuerda al
de Nietzsche: "El hombre es una cuerda tensada entre el animal
y el superhombre, una cuerda que se encuentra encima de un abismo".