El vertiginoso y lento ritmo del corazón marcan el sino de este libro. La constancia deliberada de un latido, a modo de sístole y diástole,una pulsión enternecedora y dura de perseguir la luz en los dominiosdel viento. Las promesas de un verso que gira en contra de las agujasdel reloj, más fuerte que un sueño. También la fe de un encuentro deun viaje, más allá de límites y condiciones, de un adiós de la cenizade un enemigo de la alambrada. La huida como hermana de la pluma. Unapasión arrojadiza de literatura y tinta sobre la lluvia. Las palabrasamenazándose a sí mismas. Una poesía que se rebela con la premisa dequedar en manos de la marea.
