La luna se oculta, tímidaPesarosa, pero indómitaEn un mar de nubes grisesY el azul de la concordia.Es testigo cruel, frívolo y atacanteRoza siempre tu semblanteY arrebata tu perfume.[]Morir de frío.La luna está brillante y descaradaDesde que te has ido;Solo quiero volver a verte.Cualquiera no cambia el curso de los acontecimientos.Ni provoca de nuevo la necesidad de escribir versos.Solo pretendo dejar por escrito la insistencia espontánea del alma cuando Cupido ha clavado su flecha y él está demasiado lejos.En el fondo, estas páginas son solamente para ti.